Investigadores de la UBA y el INTI avanzan en un nuevo medicamento, sin corticoides, para esta enfermedad.
La conjuntivitis es una de las enfermedades frecuentes del verano, que se contagia por vía bacterial o viral en piletas, clubes y balnearios. Aunque es una enfermedad autoconclusiva (es decir, que tienen un ciclo de vida determinado), puede extenderse por hasta tres o cuatro semanas, afectando no sólo la calidad de vida sino también la vista de quien la padece.
Para los casos bacterianos, el tratamiento más eficaz es el uso de antibióticos tópicos, es decir, en gotas, que se aplican directamente en el ojo. Para los casos virales, en cambio, no hay hasta ahora un tratamiento, sino que se aplican corticoides para disminuir la inflamación, un tratamiento que tiene sus propios riesgos.
Es por ello que un equipo de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA, en colaboración con el Instituto Nacional de Tecnología Industrial, desarrolló un compuesto llamado Virest para el tratamiento de la conjuntivitis viral que ataca al virus y sus síntomas.
El producto ganó el premio INNOVAR 2017 y se encuentra actualmente en la fase de pruebas con animales, paso previo a los ensayos clínicos controlados en personas.
Mientras tanto, es importante prevenir el contagio de conjuntivitis con una correcta higiene de las manos y la zona ocular, evitando compartir toallas, anteojos y antiparras. Como siempre, es importante su detección temprana, acudiendo al médico frente a síntomas de enrojecimiento, inflamación, ojos llorosos y secreciones mucosas (“ojos pegados”).