A menudo miramos televisión antes de dormir o intentamos ver nuestra serie favorita y nos quedamos dormidos. En esta nota te contamos por qué, para dormir bien, es mejor reemplazar esa costumbre por un buen libro.
Libro vs. Serie
En términos generales, leer un libro en papel suele ser más favorable para conciliar el sueño que ver una serie en la televisión. La lectura (siempre dependiendo del material literario) facilita la relajación y actúa como una suerte de “desconexión” que prepara al cerebro para el sueño. En cambio, mirar series (especialmente con contenido estimulante o con saltos frecuentes de atención) nos puede mantener más activos y aumentar la excitación emocional, lo que luego puede dificultar la conciliación del sueño.
La luz que se ve implicada en ambas actividades también resulta crucial para la calidad del sueño. Para leer un libro en papel nos alcanza con un velador y esto nos permite relajarnos más. En efecto, la luz que mejor favorece la secreción de melatonina y la conciliación del sueño es luz tenue y con poca componente azul (es decir, la luz cálida y de baja intensidad). En cambio, la exposición a luz brillante y rica en componentes azul (como la de las pantallas) durante la noche inhibe la liberación de melatonina y retrasa el reloj biológico, lo que se traduce en dificultades para dormir. Por todo esto se recomienda bajar la intensidad de las luces del hogar y evitar fuentes con mucha luz azul en la última hora antes de acostarse.
Pantallas: en la cama, no
Los especialistas recomiendan evitar las pantallas a la hora de dormir por varios motivos:
1. La televisión, la tablet o el celular emiten suficiente luz azul como para alterar el ritmo circadiano, que es el que regula el sueño.
2. Algunos contenidos pueden elevar la activación fisiológica y emocional, generar preocupación y ansiedad. Por ejemplo, el uso de redes sociales por la noche puede generar alteraciones de sueño.Las notificaciones de las redes sociales suelen promover «microinteracciones» (revisar mensajes, feeds) que fragmentan la atención y elevan la excitación emocional.
3. Ver varios episodios de series o películas largas reduce horas totales de sueño.
4. Ver televisión en la cama asocia el dormitorio con la vigilia, lo que empeora la higiene del sueño.
Si bien no hay una única receta para dormir bien, es importante tener y fomentar hábitos de sueño saludables, en un entorno calmo y fresco, considerar la regularidad horaria y la relajación.