Entrenar para una maratón reduce riesgos cardiovasculares vinculados a la vejez

Según un estudio reciente, el entrenamiento
aeróbico que se realiza para correr maratones puede disminuir el endurecimiento
arterial relacionado con el envejecimiento.

Se sabe desde hace tiempo que el riesgo de sufrir enfermedades
cardiovasculares es mayor a medida que avanza la edad de las personas. Esto se
debe a la rigidez aórtica, que afecta incluso a personas saludables, y que
puede provocar desde infartos hasta enfermedades del riñón y demencia. Pero no
todas son malas wp_postss.

Un estudio reciente realizado en Londres, Reino Unido, ha demostrado que el riesgo de
problemas cardiovasculares provocado por rigidez aórtica puede reducirse
considerablemente si se sigue un entrenamiento físico adecuado para correr una
primera maratón.

La investigación consistió en entrenar durante seis meses a un grupo de
138 personas que, si bien estaban completamente sanas, no tenían ningún tipo de
entrenamiento previo. Tanto en la etapa previa al entrenamiento como dos
semanas después de correr la maratón de Londres se midió la presión sanguínea
central y la rigidez aórtica de cada participante. Para ello se realizaron
resonancias magnéticas que determinaron la distensibilidad aórtica, es decir,
la capacidad que tienen los vasos sanguíneos para distenderse y contraerse
según cambios de presión y de volumen.

Los participantes de entre 21 y 69 años, que nunca antes habían corrido
una maratón, siguieron programas de entrenamiento que implicaban correr entre
10 y 20 km por semana. Cada persona pudo elegir su plan: algunos usaron el
programa de 17 semanas para principiantes propuesto por el
sitio oficial de la maratón de Londres y otros acudieron a planes personalizados. Los resultados fueron
sorprendentes: se descubrió que entrenar y correr una maratón por primera vez
reduce la presión sanguínea y la rigidez aórtica, incluso si el entrenamiento
es de baja intensidad. Esto significa que la edad de riesgos cardiovasculares
se puede posponer al menos cuatro años. Como si fuera poco, las personas más
grandes son las que mostraron mayor rejuvenecimiento.

Quienes llevaron a
cabo la investigación aseguraron al
sitio Make IT que “se espera que
quienes tienen hipertensión y arterias rígidas tengan una respuesta
cardiovascular incluso mejor” que las personas sanas.


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